María Cristina Cruz, fundadora de la marca Charmant, ha revolucionado la moda y los diseños del calzado artesanal con su marca de zapatos.
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La idea del emprendimiento de fabricar calzado inició un 14 de octubre del año 2019, pero sus inicios fueron varios años atrás. Cristina se dedicaba a vender zapatos a sus compañeros de trabajo y en redes sociales. Luego se dedicó a comprar al por mayor para seguir vendiendo. Su clientela tenía dificultad de encontrar el zapato perfecto, ya que algunos pies eran delgados o anchos y al ver esa necesidad tuvo la curiosidad de fabricarlos. Cristina recuerda que aprovechó una incapacidad laboral para tomar la decisión de renunciar a su trabajo e invertir el dinero de su liquidación en lo que hoy es su pequeña empresa.
Calzado Charmant cuenta con tres empleados y cada uno cuenta con una función importante en la elaboración de cada calzado. La marca se destaca por la fabricación de zapatos con finos materiales que los hace ultraligeros y de gran amortiguación para reducir el impacto al caminar, tela de loneta con exclusivos estampados y resistente a las lavadas. Cristina se encarga de las plataformas de yute, trabaja minuciosamente en el pegado para que queden bien alineadas, resistentes y con muy buena calidad, porque para Cristina la perfección es muy importante.
Tennis, sandalias, alpargatas, flats, zapatos de cuero para hombre, colección de calzado para niñas y una gran variedad de productos son diseñados por ella y su hija quienes ambas iniciaron este sueño de emprender y se sienten felices de estar ayudando con la economía local. Madre e hijas están comprometidas con el fomento del trabajo para beneficiar a las familias de sus colaboradores y sobretodo destacar la mano de obra nacional en la fabricación de sus zapatillas.
“ Empezamos con un sueño que ahora está listo para abrir una tienda y no vender solo zapatos, sino fabricar cinchos, carteras que combinen con el calzado. El camino es largo todavía” expresa María Cristina. Las aspiraciones de seguir creciendo con su marca motivan a esta madre emprendedora y sus hijos a continuar con esperanza, pese a la situación de la pandemia, esperando que no afecte el paso de productos por las fronteras y continuar exportando calzado Charmant hacia el país hermano de Guatemala.