ANEP: “El Salvador experimenta el déficit fiscal más alto de los últimos cuatro quinquenios y nos lleva a un descalabro fiscal”

En los últimos quince meses las finanzas públicas se han deteriorado a niveles históricos, mientras la deuda pública se ha incrementado en casi US$3,000 millones, según análisis de Proyecto de Presupuesto 2021 realizado por ANEP.

El Salvador no solo es el país de la región que menos crecerá en 2020 y el que experimentará la peor caída en sus exportaciones, sino que cerrará el año con un grave deterioro en sus finanzas públicas.

La crisis de la pandemia COVID19, el prolongado confinamiento y el cierre de empresas, entre otros factores, provocaron una caída en los ingresos tributarios acumulados de los primeros ocho meses de 2020 que rondan un 8.6%, que se traduce en unos 285 millones de dólares menos que ingresaron a las arcas del Estado.

Los gastos corrientes realizados por el Ejecutivo en 2020 hasta agosto, son 25% mayores a los del año anterior. “Son 928 millones de dólares adicionales de gastos que están reportados en el Banco Central de Reserva, respecto a 2019”, explicó el ingeniero Waldo Jiménez, gerente económico de la ANEP.

“En consecuencia tenemos 285 millones de dólares menos de ingresos, 928 millones de dólares más de gastos, lo que nos da un déficit acumulado al mes de agosto de 1,213 millones de dólares”. A esto hay que sumar los gastos propios de la pandemia, que no están del todo reflejados en los datos oficiales. “El gasto corriente más alto han sido los $375 millones de dólares utilizados para otorgar un bono de 300 dólares a las familias vulnerables”, según Jiménez.

El deterioro de las finanzas públicas es tan grave que basta comparar lo ocurrido en administraciones anteriores. “El déficit actual es mayor que los déficits fiscales que tuvimos con los gobiernos del FMLN que anualmente reportaban, en promedio, un valor de 860 millones de dólares. Estaríamos hablando de un aumento del déficit en los primeros ocho meses de 2020 de un 50% respecto de cada uno de los diez años anteriores”, advirtió.

Otra razón que ha provocado lo que ANEP califica como un “descalabro en las finanzas públicas” es el alto endeudamiento al que se ha sido sometido el país y no solo se trata de montos altos sino de las altas tasas de interés que deberá pagarse por los créditos obtenidos.

“El monto de la deuda pública se ha incrementado de manera sensible este año. El salto que ha tenido al mes de agosto es significativo, casi 3,000 millones de dólares de aumento. Cuando ingresó el FMLN el país tenía US$ 10,387 millones de deuda pública. Diez años después, eran US$19,241 millones. En sólo quince meses (del gobierno actual) con cifras hasta agosto 2020, la deuda había aumentado US$2,843 millones”.

En pocas palabras, en quince meses este gobierno ha contratado el 90% de la deuda que se contrató en el periodo 2004- 2009 y es muy posible que, al cierre de este año, este dato supere el 100%, porque el gobierno tiene autorizada emisiones y desembolsos por un total de US$3,850 millones para este año, según el economista.

A esto hay que sumar las Letras del Tesoro, conocidas como LETES, que también están al límite del 30% de los ingresos corrientes que autoriza la ley. “En los últimos diez años, el valor promedio del saldo de LETES ha estado en alrededor de US$ 900 millones, pero hemos dado un salto en el deterioro de las finanzas públicas, porque el fisco aumentó en un 66% ese monto máximo. Hemos pasado del rango de US$ 900 millones hasta el rango de US$1,500 millones”.

El problema es que los LETES deben ser usados para resolver problemas de financiamiento de corto plazo, y no para financiar la operación normal del gobierno. El saldo de LETES debería pagarse con los ingresos corrientes que recibe el fisco cada mes. Sin embargo, los gobiernos se han acostumbrado a tomar de tomar más deuda para pagar la deuda de LETES, y además, a pagar los intereses acumulados.

“Se crea un círculo vicioso, ahora debo y para pagar vuelvo a contratar deuda, pero debo pagar los intereses de la deuda anterior. Cuando la tasa de interés es 1% a 3%, no se siente el impacto, pero cuando la tasa ronda el 7% 8% y hasta 9 %, es más difícil y presiona la caja fiscal. Ese es un esquema que nos lleva a la insostenibilidad fiscal”.

El riesgo país

El alto endeudamiento coloca al país en una situación vulnerable y lo convierte en una nación de “riesgo” respecto a atraer inversión extranjera, caer en impago y más.

“La tasa de interés es lo más sensible que hay cuando se habla de préstamos y de colocación de títulos. Somos el país que tiene el mayor riesgo de Centroamérica, desde el 9F (febrero 9), ha aumentado ese riesgo. A la fecha es superior al 8%, y la tendencia sigue al alza”.

Lo más grave es que el saldo de la deuda pública que tendría el país supera el 90% del PIB, pero al gobierno aún le falta contratar la deuda que autorizó la Asamblea Legislativa, con lo que al cierre del año la deuda pública llegaría al 95% del PIB.

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Examinando el PRESUPUESTO 2021

“Examinando el Presupuesto 2021”ANEP El Salvador

Posted by ANEP El Salvador on Tuesday, October 20, 2020

 

Presentacion PDF

2021 sobre el presupuesto general nacion